viernes, 30 de enero de 2009

EL AQUAGYM



Este año voy todos los días a la piscina. Sigo nadando tres días en semana como siempre, pero además voy los martes y jueves a aquagym. Los días de natación son más intensos. Mi grupo nada ya una barbaridad de metros y a veces tengo la sensación de estar entrenando para las olimpiadas de Londres mínimo. Llegamos, nos saludamos, atendemos a una pizarra llena de instrucciones y salimos hechos unos pepes para no parar hasta las menos diez en que comenzamos la vuelta a la calma.
El aquagym es arena de otro costal, es algo más artístico, más social, pero no deja de ser un deporte y duro. Se trata de una especie de aerobic, pero en el agua y sin hacer pie. El trabajo de las piernas resulta básico para poder mantener la cabeza fuera del agua, y no ahogarse. Se practican dos tipo de patadas, la de waterpolo (braza sin desplazamiento) y la de bicicleta. La frecuencia de patada tiene que ser bastante alta para que además de continuar a flote, puedas realizar la coreografía que la monitora realiza felizmente fuera del agua. Te proporcionan unos guantes de pato para que tengas mayor flotabilidad con poco esfuerzo de brazos. Algunas personas se colocan también un cinturón para evitar lesiones en las lumbares, mi consejo es que se haga uso de él durante las primeras clases para no cargar demasiado atrás.
Las coreografías son divertidas y algunas veces suponen el empleo de mucho material: fideos, tablas, pesas de corcho, cintas, etc. El tiempo en realidad pasa volando porque todo resulta ameno. Además de las coreografías también hacemos trabajo localizado de abadominales con las piernas fuera del agua, y de brazos apoyando manos en el bordillo y sacando medio cuerpo del agua. Las clases terminan siempre con un buen estiramiento y ejercicios de relajación que te dejan completamente nueva.
Lo recomiendo a todo aquel al que la natación le pese demasiado por tratarse de un deporte individual solitario y monótono, y desee beneficiarse de las ventajas de trabajar en el agua.

Por cierto, si alguien tiene pensado hacerme ahogadillas este verano en la playa que se lo plantee seriamente, porque a mí ya no me hunde nadie!

1 comentario:

Beatriz Pérez Doncel dijo...

te veo escamas detrás de las orejas, merchi...